Las ampollas son sacos llenos de líquido en la capa externa de la piel. Se forman debido al roce, calor o enfermedades de la piel. Son más comunes en las manos y los pies.
En adultos con factores de riesgo para desarrollar un pie plano “se podría ayudar a prevenir si estos se detectan a tiempo”, apunta el experto del Consejo General de Colegios de Podólogos.